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¿Cómo es el postoperatorio de la rinoplastia?

Hay un consenso general entre especialistas que asegura que una de las cirugías plásticas más realizadas es la de nariz. Eso es cierto. Por año, miles de pacientes, mujeres y hombres, eligen someterse a esta técnica para reparar por cuestiones de salud o afinar sus rasgos y simetría por estética, sin poner en juego su armonía natural.

Lo cierto es que quienes todavía no se han decidido por ella, pero la tienen en sus planes próximos para ver mejorada su calidad de vida y confianza se pueden preguntar cómo es el postoperatorio de la rinoplastía.

Una consulta muy común para profesionales expertos como nosotros en CEQ que a continuación con gusto evacuamos a consideración de ustedes.

Se trata de una operación que demanda muy poco tiempo en quirófano, entre 1 y 2 horas como máximo, teniendo un alta el mismo día luego de permanecer un tiempo prudente en sala a la espera del despertar de la sedación.

En ese momento, puede resultar lógico tener algunas reacciones como nauseas que se van a los pocos minutos. Luego sí, las molestias comunes asociadas a la cirugía se evidencian: cierta congestión, fragilidad, aletargamiento, supuración e inflamación. Más el impedimento de sonarte la nariz por al menos siete días posteriores para no correr el riesgo de volver a abrir las incisiones de la operación.

Postoperatorio rinoplastia día a día

En estas épocas, este procedimiento resulta simple y hasta rápido sin que aparezcan prácticamente problemas adyacentes. Lo cierto es que una recuperación de rinoplastía puede darse sin mayores altibajos para el paciente en cuestión, sabiendo siempre que se trata de un área frágil e importante para la respiración habitual, por eso no resulta difícil saber que pueden darse algunas incomodidades en esta etapa posterior y de reposo, durante unos días, aunque eso sea perfectamente normal.

Tan así, que es de costumbre que en las primeras 24 horas se evidencie cierto tipo de sangrado y se observe el contorno inflamado con aparición de hematomas y algunas marcas cercanas a la vista. Algo que invariablemente comenzará a minimizarse al cabo de 48, hasta irse a las 72 o 96 horas posteriores.

Será común también notar que la zona tratada sufre adormecimiento o hasta rigidez en su extremo, algo que puede permanecer por meses, dependiendo el paciente, ya que no todos presentan los síntomas en simultáneo.

Bien viene considerar en este tramo de la recuperación, que para que sea exitosa y las molestias disminuyan notablemente, es ideal seguir las sugerencias del profesional tratante ya que es quien más conoce como tratar la zona para llegar a un resultado a gusto y más rápido. Algunos de ellos, los principales, los explicamos a continuación. Vale decir que no todos los casos son iguales y que algunas personas hacen una curación total antes que otras.

Una vez restablecida completamente la piel de esta zona al cabo de unos días, ya sin moretones, dolor ni inflamación, el resultado será increíble.

¿Qué esperar post operación de nariz?

Luego de ella, con el alta y de vuelta en casa, tenés que tener en cuenta que el tiempo promedio de convalecencia es de aproximadamente 15 a 20 días, según necesidades. En ese periodo se debe evitar largas horas en posición extendida, mucho mejor resultará dar pequeños paseos ya que caminar hace bien al proceso de desinflamación. En cambio, hacer tareas en la computadora o leer si es posible. Lo que no se aconseja en absoluto es usar teléfono o móvil en la oreja, trae riesgo cierto de producir marcas y hemorragias, y así atrasar más la recuperación.

¿Cómo evitar la inflamación en el postoperatorio de la rinoplastia? ¿cómo beneficiarse con cuidados de rutina?

– Una buena alimentación, generar hábitos saludables, descanso y seguir al detalle las recomendaciones del cirujano plástico, así como los remedios que recete son decisivos a la hora de ver resultados exitosos.

– Dieta apropiada. Es común que muchos pacientes sientan malestar y hasta vómitos luego de realizarse el procedimiento estético, debido al uso de anestesia. Una alimentación sobre todo a base de bebidas como sopa, tés, papilla y agua en esas primeras horas, ayuda mucho. Al segundo día ya se puede incorporar lentamente más sólidos que no alteren la función del aparato digestivo.

– Dormir lo suficiente. Aun cuando no resulte una cirugía muy significativa al proceder, sí es vital para la mejora buscada, y por eso, el descanso es prioritario. Al menos luego del alta, el reposo debe hacerse en su totalidad. Por las próximas dos semanas también, algo menos recurrente, y siempre evitando toda fuerza posible.
– Prevenir sonar la nariz. No resulta fácil porque es un hábito adquirido, pero es necesario. Todo paciente que se haya realizado rinoplastia debe esperar al menos una semana para volver a hacerlo. De lo contrario, es muy probable que las incisiones se abran y/o produzca sangrado evidente. Mas allá de ser una función básica de este órgano, se debe tener paciencia y solo pasar el pañuelo suavemente de ser necesario, nunca con fuerza. Mover mucho el rostro y llorar tampoco conviene en esos primeros momentos. Lo que sí se considera es hacer lavados nasales, esto facilita el cierre de heridas y lleva humedad necesaria a la zona. Si hubiera congestión abundante, existen sprays que el profesional indicará para aliviar.
– Tomar suficiente líquido. Ya de por sí se notará más deshidratación debido a que no se puede respirar normalmente por nariz, y eso elevará la sequedad. El agua ayuda mucho a descomprimir e hidratar. Así como los humidificadores de escritorio que regulan la humedad percibida.

-No dar por superado el aspecto emotivo. Es más común de lo que parece que los pacientes que se someten a una cirugía de nariz sufran episodios de estrés y tristeza tras ella. Y muchas veces tiene relación con que se notan el rostro inflamado, oscurecido y con molestias, aparte de no poder desenvolverse normalmente en una primera etapa. Hay que aceptarlo, trabajarlo y darse tiempo propio para sanar, también desde lo mental. Suele disolverse al comenzar a ver el resultado positivo que se esperaba.